Soneto 25. CAFÉ TORREFACTO
Como esencia de café torrefacto,
en pequeños sorbos de la esperanza,
con un amargor de triste venganza,
me has dejado en el olvido ipso facto.
Tras la escena y el primer entreacto,
el olvido con olvido se alcanza
y en medio del trajín, con la mudanza,
el corazón también olvida el pacto.
Negros cafetales de aromas varios
son acervo cultural de la tierra
y huelen a semillas con encanto.
En la tarde de los aniversarios
tu amor, amor, en mis flores se encierra
y tú eres musa con quien bailo y canto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario